El señor Alessandro Tonacci, director
de la mencionada Biblioteca, invitó a su paisano, nuestro director Ignazio
Pollini, a hacer una presentación del
proyecto Bibliomulas pues, en el mes de
diciembre, su actividad está dedicada a mostrar las iniciativas interesantes de
desarrollo cultural y educativo que surgen y se mantienen en países en
desarrollo; así, han invitado educadores y/o promotores sociales provenientes
de Siria o África, tanto como latinoamericanos; de modo que era propicia la
ocasión para hablar un poco, no solo de lo que significa Bibliomulas, sino de lo que es Venezuela, cuál es su
situación actual y cómo se vive entre todo lo que se dice de nuestro país en
Europa.
La presentación, pautada para las
8:30 de la noche, estuvo a cargo de Ignazio, director y promotor principal del
programa Bibliomulas Mérida, ante una audiencia de unas 40 personas,
provenientes en su totalidad de la población de Saló, un enclave maravilloso a
orillas del lago Garda en Lombardía.
Durante su intervención, se dio a conocer en detalle lo que hacemos, lo
que somos y los cuantiosos “por qué” de este programa que lleva más de 12 años
en Mérida. A menudo ocurre con este tipo de encuentros que las personas
provenientes de entornos meramente urbanos, entienden poco o nada la necesidad
de insistir en una “biblioteca” que se traslada de caserío en caserío a lomo de
mula; pero, cuando tenemos la posibilidad de explicar el contexto y desmenuzar
el tipo de abordaje que emprendemos y otros detalles de nuestra cotidianidad,
es entendido con lógica indiscutible.
También, la conversación giró mucho
en torno a Venezuela. No hay que explicar que, allá donde vayamos, la situación de Venezuela
despierta siempre gran interés, principalmente debido a la cantidad de
información a favor y en contra que, usualmente, desdibuja grandemente la
realidad, tanto por lo mucho que tiene de increíble como por lo mucho que tiene
de difícil; por tanto, las preguntas sobre “lo que está ocurriendo en el país”
no se hicieron esperar, convirtiendo el encuentro en una ocasión especialísima
que tomó más de una hora adicional a lo que se había programado, para ganancia
de todos los involucrados, sobre todo de Bibliomulas, cuyo representante hace
todo lo posible por ponerla en el mapa de la mejor forma.