Les vamos a explicar: En Bibliomulas estamos
convencidos de que no podemos trabajar solos. Es más, no debemos hacerlo y no
nos gusta. La clave del éxito para cualquier iniciativa es rodearse de los
mejores, entender las limitaciones que cada grupo tiene y cubrir con las
fortalezas de los otros, las debilidades propias. Esa sinergia envidiable es la
causa por la que un gran número de empresas, organizaciones y centros de trabajo
desarrollan una carrera en positivo. Nosotros no somos los menos.
A través de una agradable y extensa red de organizaciones
que prestan trabajo comunitario, nosotros hemos creado un entorno que nos es
propicio: nada mejor para demostrarlo que las jornadas de La Vergara Alta, ese
bonito caserío de El Valle que, lamentablemente, está aquejado de problemas.
Tenemos dos formas de abordar la comunidad, en ambas,
es la misma comunidad la que nos invita y nos acoge, en la mayoría de los casos
porque se establece un plan cuidadoso de abordaje desde la lectura dirigido a
los más pequeños y preparado con ciertas rutinas de alto significado lúdico. En
la Vergara a ese abordaje le sumamos un contenido francamente importante: el
auxilio médico – asistencial en manos de PAULA (Primeros auxilios ULA) y el
apoyo social que brinda Caritas de Venezuela. Bibliomulas pues, se convierte en
un vehículo que opera dentro de una premisa muy sencilla: tan pronto como los
niños del caserío escuchan nuestra llegada, salen alborozados a nuestro encuentro
formando, de ese modo, las condiciones necesarias para que se cumplan los propósitos
de la visita.